Bueno después de todo el Otoño/invierno detrás, por fin he podido sacar unas fotos que no sean borrones de los centenares por no decir miles de grullas que pasan el invierno en mi tierra.
Las joias tienen mas miedo a las cámaras que el yeti, o yo hago mas ruido que un caza en pleno despegue.
Estas dos primeras tuve que arrastrarme por debajo de una empalizada para que no me vieran je je
Estas otras dos han sido sacadas desde el coche en marcha pues parece ser que de los vehículos se asustan menos.